Fotografías son efecto de concentración en fenómeno de acumulación de la luz natural en el fotograma obtenida por larga registración con cámara con la abertura más pequeña y también con cámara estenopeica. El lugar fotografiado es el paisaje de un desierto cerca del volcán El Teide. La isla de Tenerife está inundada de luz casi todo el año, sus excepcionales condiciones de iluminación provocan una percepción distinta del paisaje. La luz intensa y contrastiva impone una mirada apurada y sintética a través de los ojos entreabiertos. Cuando expongo las imágenes por la abertura más pequeña y la cámara estenopeica, doy vuelta a la situación: uso largos tiempos de exposición y dejo que la imagen se filtre lentamente en el negativo. La cámara registra detalles que en estas condiciones permanecen invisibles para los ojos humanos. Las fotografías se situan lejos de la tradición de “un espejo de la realidad”. La luz tan intensa altera la lógica de la superficie y genera una ilusión óptica que a sus imágenes les da un sentido nuevo.
Beata Długosz
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